25N: Las que no están, las que están y las que peligran

El pasado miércoles, nos reunimos en el cruce 25N, resignificando el lugar como punto de encuentro y conmemoración, en el que celebramos un rito para homenajear a todas nuestras hermanas. Las que no están, las que están y las que peligran. 🔥♀️

📃 Hoy 25 de noviembre, día contra las Violencias Machistas, nos volvemos a reunir con el fin de mostrar nuestro respeto a las 80 mujeres que en este año 2020 han sido asesinadas a manos de sus maridos, parejas, amantes, puteros, en un año marcado por la pandemia, que agudiza más aún las desigualdades y todas aquellas violencias que sufrimos las mujeres, por el hecho de ser mujeres. 

Todas y cada una de nuestras compañeras asesinadas tenían una vida, su vida, que fue arrebatada en un momento inesperado de su ciclo vital, y no por voluntad propia, sino por la decisión de un hombre que se sabe reforzado por un sistema jurídico, cultural, social, económico, laboral. En definitiva, por un gran número de agentes sociales, que forman el sistema patriarcal, y que se niegan a reconocer los derechos de las mujeres y la necesidad imperiosa de cambio y evolución hacia un sistema más justo, equitativo e igualitario. 

Queremos visibilizar nuestra diversidad y destacar las dificultades comunes y diferentes que nos encontramos. Por ello, hoy, y cada uno de los días, tenemos presentes a nuestras hermanas latinoamericanas, africanas, asiáticas, de Oceanía, europeas y norteamericanas. Juntas buscamos generar redes y construir sororidad para continuar combatiendo las opresiones que el sistema patriarcal nos impone (o siembra) en nuestros caminos. 

Como decíamos, hoy no estarán con nosotras ochenta hermanas que han sido asesinadas, pero, seguiremos juntándonos y haciéndonos oír por las niñas,  por las adolescentes, por las madres, por las que no lo son, por las ancianas, y por nuestras ancestras, las cuales, en siglos pasados allanaron nuestro camino, y tuvieron que soportar constantes torturas por ser sabias al utilizar la riqueza de la tierra y dar calma a aquellas y aquellos que sentían dolor por enfermedad, por asistir en un parto, por dar remedio a las mujeres que no querían traer más criaturas al mundo, por generar apoyo entre las mujeres más vulnerables, por ser viudas, o no casarse, por ser rebeldes e independientes y no seguir los patrones establecidos. A estas mujeres las llamaron BRUJAS. Les robaron su sabiduría, las excluyeron, ignoraron y menospreciaron su trabajo, las criminalizaron y crearon el mito de las malvadas, las impuras, las oscuras. 

Por todas ellas y por las que vendrán, hoy estamos aquí, creando AQUELARRES donde el apoyo mutuo, la sabiduría diversa, y la lucha, sigue en pie y emerge en cada una de nosotras: ¡¡PORQUE SOMOS LAS NIETAS DE LAS BRUJAS QUE NUNCA PUDISTÉIS QUEMAR, VIVAS NOS QUEREMOS!!